Panteón de grandes dimensiones, parece más una pequeña iglesia que no una tumba. La familia Marsans encargó su construcción a Juli Maria Fossas, arquitecto preferido de la opulenta familia. Es una obra llena de detalles donde se puede admirar el gran trabajo en él realizado por los artesanos de la época, especialmente las dos figuras de mármol que franquean la puerta: a la izquierda San José con el Niño Jesús en brazos y a la derecha San Marcos con un libro en la mano y un león a los pies. Rostros que simbolizan la infancia,la juventud, la madurez y la muerte; el búho símbolo de la sabiduría y la vigilancia, el perro fiel y coronando la cúpula central, un ángel juvenil sentado, sin olvidar el hermoso trabajo de forja y cristaleras.
. Fuente: http://thedarkhousemar.blogspot.com.es/2012/03/cementerio-de-horta-barcelona.html