La capilla fue proyectada ya en los planos originales por Josep Font y Gumà pero no se iniciaron las obras hasta el 1909, gracias a la donación y colecta del padre Anton Miret y Massó. La capilla está construida con planta rectangular con coro y con cubierta sinuosa, típicas de las capillas románicas, y coronada con una espadaña.
Los aspectos más destacables son los vitrales, el techo de madera policromada y el suelo de pavimento hidráulico. No obstante lo que destaca por encima de todo son los vitrales por su alto valor artístico y técnico, siendo posible atribuirlos al taller Amigó de Barcelona.
El conjunto de vitrales está formado por el que está situado en el ábside de la capilla, compuesto por tres cuerpos y representa en la parte inferior a tres figuras sobre nubes que corresponden a Santa Teresa de Jesús, vestida con su hábito carmelitano de las descalzas ; en el centro San Antonio Abad con su hábito franciscano de color gris oscuro y llevando al Niño Jesús y a la derecha Luis IX de Francia (San Luis), que se muestra sosteniendo un cojín con la corona de espinas del Salvador.
En medio del espacio donde se han dispuesto las tres figuras y el resto de cielo azul estrellado hay una franja a lo largo de todo el ventanal con una cenefa con motivos geométricos. Por encima de la cenefa se muestra un gran cielo azul compuesto por estrellas de cinco y seis puntas y esferas de colores de diferentes tamaños que representan astros y planetas. Dos vitrales practicables situados a ambos lados de la capilla que muestran la misma representación de motivos celestes de forma que se da continuidad al tema iconográfico del vitral del ábside. Rosetón con motivos geométricos. En el centro hay dos figuras romboidales sobrepuestas que acaban formando una estrella de ocho puntas sobre una tercera estrella, también de ocho puntas, lila y puntas verdes. Todas ellas tienen un eje, punto de encuentro central común: una esfera lila. Esta composición geométrica destaca sobre un fondo azul y rodeada por una bordura de vidrio amarillo y una segunda turquesa.– El claustro está situado alrededor del patio interior que hace de confluencia entre el cuerpo central, las dos alas de levante y poniente así como la capilla. Tiene una decoración de estilo mudéjar con arcos escarzanos separados con pilastras construidas de ladrillo visto. Las paredes interiores del patio están enyesadas de color blanco con cuatro inscripciones (en catalán pre-normativo): “Sens caritat nosabs amar”, “Tanta caritat pots haver com pots voler”, “Qui es en caritat es engracia de Deu” i “Si no pots donar desitja donar”. Destaca la gran profusión de arcos y dinteles en las aberturas, todas ellas de ladrillo visto.
Red de Municipios Indianos
Gracias a la amabilidad, entusiasmo y profesionalidad de Montserrat Falguera (Directora de Administración y Gestión) ha sido posible fotografiar y documentar el Redós de Sant Josep i Sant Pere