El Santuario de Sant Josep de la Muntanya es un edificio modernista con una estructura formal neorrománica, situado en el barrio de la Salud. Fue construido por Francesc Berenguer i Mestres entre los años 1895 y 1914. Francesc Berenguer, colaborador habitual de Gaudí, no contaba con el título oficial de arquitecto y por eso el proyecto lo firmó Pascual Tintorer, amigo suyo y arquitecto municipal de Gràcia. Antonio Barba fue el constructor de la obra.
El santuario está formado por un conjunto de edificaciones, unificado por la utilización en su paramento de mampostería, excepto los marcos de las aberturas y las esquineras, realizadas con piedra tallada. Se definen tres cuerpos, el convento-asilo, la iglesia en el centro y la casa de las novicias. Los tres, adyacentes entre sí, se presentan como un conjunto aislado, con la fachada principal orientada a mediodía. Es en esta fachada donde se localizan los tres portales independientes de acceso, que dan a una plataforma elevada a la que se accede desde una explanada congregacional por una escalera doble.
El convento-asilo presenta una estructura en alzado de cuatro plantas piso con cubierta de doble vertiente. En el ángulo suroeste hay una torre mirador con un piso más a modo de galería y coronada por una terraza. Las aberturas presentan diversas tipologías: simples, geminadas y triforadas, todas ellas rematadas con arcos angulares. El acceso al interior de este edificio se haces desde el primer piso, ubicándose al lado izquierdo. Éste da paso a un amplio vestíbulo que con el claustro central sirven de núcleos distribuidores. El claustro presenta dos pisos de columnas de hierro y arcos rebajados de ladrillo.
La iglesia ocupa el cuerpo central, está orientada norte-sur y está cubierta por un tejado a doble vertiente. Es un templo de nave única, con transepto, ábside semicircular con ventanas verticales y una gran capilla del Santísimo Sacramento. Se cubre con bóvedas vaídas sobre arcos recogidos en pilastras. Éstas, que no llegan a tierra, se recogen en ménsulas de piedra en que es bien patente la característica decoración de Berenguer, presente también en los capiteles, en vía crucis y en las puertas. El resto de los adornos incluidos vitrales, mosaicos de las vueltas, pinturas, trona, altares … son obra moderna posterior a la guerra, durante la cual se destruyeron los que Berenguer había diseñado.
La iglesia ocupa el cuerpo central, está orientada norte-sur y está cubierta por un tejado a doble vertiente. Es un templo de nave única, con transepto, ábside semicircular con ventanas verticales y una gran capilla del Santísimo Sacramento. Se cubre con bóvedas vaídas sobre arcos recogidos en pilastras. Éstas, que no llegan a tierra, se recogen en ménsulas de piedra en que es bien patente la característica decoración de Berenguer, presente también en los capiteles, en vía crucis y en las puertas. El resto de los adornos incluidos vitrales, mosaicos de las vueltas, pinturas, púlpito, altares … son obra moderna posterior a la guerra, durante la cual se destruyeron los que Berenguer había diseñado.
El último cuerpo, situado a levante, fue diseñado como un edificio de viviendas con semisótano, planta baja, principal y dos plantas piso. Resalta el principal, con balcones y tribuna central, así como una capilla. El edificio se utiliza como casa de novicias.
El Santuario es un centro de culto y peregrinación, fue el primero del mundo dedicado a San José. También acoge la obra social iniciada por la Beata Petra de San José, de la Congregación de Madres de los Desamparados y San José de la Montaña, comunidad religiosa que gestiona el santuario desde su inauguración, donde tenía cuidado de niñas huérfanas. Actualmente es un centro de acogida de menores en riesgo de exclusión social.