En la segunda mitad del siglo XIX, y como consecuencia de la concienciación social y política de que los enfermos mentales debían ser tratados con mayor dignidad, surgen iniciativas privadas para dar respuesta a la carencia de servicios públicos adecuados para hacer frente a esta necesidad. En este contexto surge, a finales del siglo XIX, el Manicomio de Reus por iniciativa del Dr.Emili Briansó y otros promotores reusenses que aportaron el capital necesario para su construcción, constituyéndose como sociedad anónima para conseguirlo. Lluís Domènech i Montaner, amigo de Pau Font de Rubinat, primer presidente del Consejo de Administración del Manicomio de Reus, fue el arquitecto seleccionado para desarrollar el conjunto arquitectónico, siguiendo los criterios asistenciales más avanzados de Europa. En 1910 el Manicomio de Reus cambió su nombre por el de Instituto Pere Mata, en recuerdo del médico Pere Mata Fontanet que fue alcalde de Reus, diputado, secretario de las Cortes y catedrático de Toxicología en Madrid, siendo el primero en introducir la enseñanza de la Psiquiatría en la Universidad.
Esta es una obra de gran envergadura, con estructura de mini ciudad, donde se aplican innovadores conceptos de urbanismo, de seguridad, de planificación de espacios, de modulación, ornamentación y uso de materiales. Se trata de un conjunto de pabellones, cada uno de los cuales está destinado a unas funciones específicas. Todos ellos tienen unas características estilísticas comunes, conseguidas con la utilización de los mismos materiales: la mampostería, la obra vista, la piedra y la cerámica vidriada. La construcción del Instituto Pere Mata se inició en 1897, con los pabellones de Servicios Generales, Beneficencia y Tercera Clase; en 1900 fue la fecha de inauguración del hospital, aunque las obras no se terminarán hasta 1919.
El Pabellón número 6 de Primera Clase (Pabellón de los Distinguidos): Destinado a los internos con más recursos económicos, su decoración es la más exuberante, con diferencia, y se ha conservado intacta en todos los elementos: vitrales, lámparas, cerámicas, maderas, hierro forjado, etc. La construcción se realizó en tres etapas: primero los dos cuerpos extremos conocidos como los «chalets», entre los años 1901 y 1904. Más tarde se construyó el cuerpo central que une los dos edificios, que se acabó en 1908. El edificio consta de planta baja y tres plantas. La planta baja tiene los espacios comunes y de socialización: salón, comedor y sala de billar, que están profusamente decorados y tienen espacios a doble altura. En la primera y segunda plantas, además de la planta baja, se sitúan las diferentes habitaciones, a las que se llega a través de galerías que, con ventanas abiertas al jardín, actúan de pasillos. En los extremos de las galerías hay los cuartos de baño y los sanitarios comunitarios, que se complementan con los inodoros individuales que hay en cada una de las habitaciones. Los dormitorios y salas anexas conservan el mobiliario original. La tercera planta se utilizaba para instalaciones de servicios, como el guardarropa.
La puerta principal, al este, combina el basamento de mampostería, los pilares de obra vista con detalles de piedra y cerámica vidriada, y las rejas de hierro forjado. La puerta secundaria o conocida como puerta de los carros, al sur, está decorada con paneles cerámicos con la representación de ángeles, leones rampantes, el escudo de Reus, el de Cataluña y el nombre del Instituto.
– Fuentes: http://www.diputaciodetarragona.cat/marc/web/diputacio-de-tarragona/reus/institut-pere-mata
. https://ca.wikipedia.org/wiki/Institut_Pere_Mata
