Esta farmacia se encuentra en el barrio de la Ribera, en Ciutat Vella, es la más antigua en funcionamiento en Barcelona, fue inaugurada en 1561. Inicialmente estaba ubicada en el mismo barrio, però fuera de las antiguas murallas, pero después de la Guerra de Secesión (1714), el rey de España Felipe V, mandó destruir este barrio, como represalia por la actitud combativa que habían mantenido los catalanes. Allí hizo construir una ciudadela militar, por lo que desapareció gran parte de La Ribera que daba directamente al mar. Como consecuencia de ello, la farmacia Padrell se trasladó a la actual ubicación de la calle Sant Pere Més Baix.
En 1857 se hace referencia a esta farmacia como licenciado Mariano Escuder; lo sucedió Miquel Escuder, que en 1903 se dejó llevar por la nueva tendencia y encargó la decoración a la nueva moda al arquitecto modernista Manuel Joaquim Raspall i Mayol. Más adelante encontramos la farmacia a nombre de «Hijos de Miguel Escuder, farmacia antigua del doctor Padrell”. Después la farmacia estuvo dirigida por la licenciada Agustina Vilasaló que fue sucedida, a su vez, por Barnadas. El año 1962 Pablo Vilalta compró la farmàcia y por último, desde 1982 Josep Fonoll es el propietario actual.
La fachada consta de una única abertura formada por una puerta central y dos escaparates laterales que en global forman un conjunto impresionante. En las maderas de la entrada podemos ver el “coup de fouet”. Tanto el tirador de la puerta como las escuadras que soportan los escaparates están hechos de hierro forjado trabajado con líneas curvas que representan una delicada decoración floral. Pero lo que más destaca del exterior de la farmacia son las vidrieras emplomadas policromadas de los escaparates y del montante de la puerta, diseñadas por Raspall y realizadas por el vidriero Joan Espinagosa i Farrando. En la vidriera, en forma de tímpano, podemos ver escrito en tipografía modernista «Farmacia Padrell – Fundada en 1561”, con un sol y sus rayos de fondo y en los lados, dos motivos florales con sus sinuosos tallos. En los cristales interiores de los escaparates también encontramos vitrales que representan dos conjuntos vegetales que salen de unos bonitos albarelos decorados en azul.
En el interior se abre un espacio rectangular bastante largo. En la pared lateral derecha destaca un conjunto de armarios con vitrinas, de madera de color oscuro, que presenta pequeños detalles en forma de altos relieves. Encima de los armarios hay una cenefa que encinta todo el perímetro interior de la farmacia y que representa un herbario donde cada elemento lleva su nombre culto, binominal. En una de las paredes que da paso a la trastienda encontramos una pequeña hornacina en forma de capillita donde se guarda una talla escultórica de madera de la Virgen María con el Niño Jesús. Según dicen este conjunto escultórico pertenece a la época fundacional. Como último elemento podemos destacar una lámpara de hierro forjado y cristales verdes donde destaca la decoración con rosas, tréboles de tres hojas y las cuatro barras. Esta pieza ganó el primer premio de diseño en la Exposición Internacional de Barcelona de 1929.
– Fuentes:
. Farmàcies modernistes: https://issuu.com/emblematics/docs/farmacias-modernistas-modificado/1
. Modernisme (vptmod): https://vptmod.blogspot.com/2008/11/farmcia-pedrell.html
. Portal d’Informació Urbanística BCN: https://ajuntament.barcelona.cat/informaciourbanistica/cerca/ca/fitxa/1299/–/–/cp/
Protecciones:
Monumento incluido en el Catálogo de Patrimonio Arquitectónico de Barcelona con nivel de protección B.
Agradecimiento:
Gracias a la amabilidad y disposición de la propiedad ha sido posible fotografiar y publicar el interior de la farmacia.
